Una gran cantidad de personas perdieron la vida en los incendios forestales de Grecia hace un par de años o el último desastre sucedido en Notre Dame demuestran la necesidad de transferir los conocimientos adquiridos mediante la investigación forense a prácticas cotidianas para prevenir futuros incendios.
A lo largo de los años, la búsqueda del control del fuego se ha convertido en el santo grial de la ingeniería. A continuación se explican algunos pasos a seguir en caso de incendio.
- La primera acción consiste en avisar al teléfono de emergencias 112. Aunque el incendio parezca pequeño no se sabe las consecuencias que puede tener.
- Conocer las vías de escape es primordial. Se debe conocer la ubicación de los extintores y como usarlos.
- Cortar la corriente eléctrica y la entrada de gas es la siguiente acción a realizar. También retirar los productos combustibles o inflamables próximos al fuego.
- Si el fuego es pequeño y se puede controlar se puede apagar, pero siempre situándose entre el fuego y la vía de escape. En esta acción no usar agua cuando se trate de instalaciones eléctricas ni cuando el incendio es por líquidos inflamables (aceite, gasolina, etc.). Si ve que no puede apagarlo, no corra riesgos inútiles, busque un lugar seguro y abandone la zona.
- Al abandonar el lugar incendiado hay que: cerrar las puertas al salir, andar a nivel del suelo si hubiera humo y mantener la calma.
- No hacer uso de los ascensores como vía de evacuación ni detenerse hasta situarse suficientemente lejos del lugar del siniestro. No entorpecer la salida de otras posibles personas afectadas.
- En caso de no poder abandonar la vivienda por el fuego, encerrarse en una habitación, tapar las ranuras de la puerta, preferiblemente con trapos mojados para evitar que entre humo.